Las empresas afirmaban que el gasto medio en mantenimiento ha descendido un 40 por ciento, algo lógico si tenemos en cuenta que hemos pasado unos años de tremenda recesión y quien más quien menos ha recurrido al «hágalo usted mismo».
Sin embargo, ese mismo artículo contenía declaraciones del gerente de un varadero que decía que él no había notado descenso de mantenimiento, sino que se habían adaptado al mercado bajando precios y tenían muchísimo trabajo.
La guinda la ponía Capitanía Marítima, suponemos que de Alicante, diciendo que la causa podía residir en que muchas embarcaciones habían optado por abanderar en países con legislación más laxa incluso en materia de titulaciones. Supongo que lo que realmente quería decir es que somos unos sinvergüenzas kamikazes a los que nos encanta navegar por ahí en barcos a punto de explotar y sin licencias de ningún tipo. Pues para empezar, el cretino que afirmó eso desde Capitanía, no se ha enterado de que la última reforma de las titulaciones náuticas en nuestro país que, en mi opinión, se ha quedado más que a medias, establece la obligación para los españolitos de disponer de titulación a fin de patronear barcos de bandera extranjera en aguas españolas. Y tampoco sabe que los primeros interesados en no hundirnos ni explotar con nuestros barcos somos nosotros, los navegantes.
Aquí lo que ha ocurrido es que ha habido una crisis tremenda que ha hecho que mucha gente no pudiese mantener bien sus barcos, o haya tenido que malvenderlos y, desde luego, muchos no han podido ni soñar en utilizarlos porque simplemente no se lo podían permitir. Y ¿qué han hecho las autoridades y muchas empresas del sector y gerentes de instalaciones portuarias para ayudarnos? Nada, absolutamente nada, se han subido tasas, incrementado precios de amarres, etc… y mucho llorar, eso sí, pero al navegante que es el que paga la fiesta, simplemente lo han molido a palos. Ahora, encima, vienen las empresas de mantenimiento y alguna Capitanía a insultarnos de este modo, intentando crear alarma y recuperar cuota de mercado unos y supongo que en un estúpido intento de intentar forzar endurecimientos normativos por parte de las segundas.
¿Quieren barcos bien mantenidos? Es fácil, hágannoslo posible. ¿Cómo? Eliminen la T0, la T5, el impuesto de matriculación, tengan precios no abusivos en servicios de mantenimiento y en los puertos, hagan una legislación que nos haga fácil lucir la bandera española y no lo conviertan en un pabellón con el cual nunca sabes si lo llevas todo en regla.
Entonces, en vez de tirar el dinero en chorradas impuestas por ley, podremos dedicar esos reucursos a mantener nuestros barcos y lucir de nuevo el pabellón español. Entretanto, yo seguiré recomendando a mis clientes que abanderen fuera y, si pueden, que se lleven sus barcos a sitios donde los costes sean más razonables y continuaré pensando que son ustedes unos carroñeros que aprovechan las desgracias ajenas para intentar incrementar sus cuotas de mercado y de poder… ¡Carroñeros!