El insólito naufragio de un yate de vela de 65 metros de eslora, aparejado con un solo palo de 75 metros de altura, ha dejado atónita a la comunidad náutica. Pero las cosas no suelen pasar porque sí. Un rápido análisis de las pocas imágenes que se han difundido en estos tres días nos permite suponer por qué el barco se hundió de forma tan rápida, hecho que fue grabado por dos cámaras de seguridad.
Gracias a una buena amiga, periodista náutica en Sicilia, he tenido acceso a algunas pruebas que podrían resultar transcendentales en el curso de la investigación y que nos abren la puerta hacia la posible causa de lo que pasó.
ESTABA CERCA DE LA COSTA.
En la imagen de la izquierda podemos ver el barco fondeado junto a la goleta holandesa que rescató a las quince personas que lograron embarcar en la balsa salvavidas. Ambas naves están situadas a escasos 60 o 70 metros de la costa, lo que deducimos por la posición de la roca que aparece en el margen inferior izquierdo de la fotografía de la derecha. Tiene lógica, porque si el Bayesian se hundió donde descansan ahora sus restos, a 50 metros de profundidad, significa que debería haber largado 150 metros de cadena y cabo, cosa imposible. Detrás de los dos barcos se ve, además, el muelle de Porticello.
LA INTENSIDAD DEL VIENTO.
El accidente se grabó desde dos cámaras de seguridad. En la foto sobre estas líneas se ve cómo la proa del barco apunta al Este, de donde llegó la tormenta. También se aprecia que su palo está en posición normal; se curva un poco hacia atrás por el viento, pero no parece que se trate de un huracán, pues la lona de un barco de motor que vemos en primer plano a la izquierda permanece sujeta; un viento fuerte la hubiera arrancado con facilidad. En ese mismo momento, desde otra cámara, sita en una terraza del bar del puerto, las sombrillas y sillas permanecen en su sitio a las cuatro y cinco de la madrugada (foto de abajo).
MÁSTIL DESPLAZADO
En el fotograma inferior, la cámara de seguridad graba el velero con el palo ya claramente desplazado hacia popa; un mástil de estas dimensiones no puede soportarse apartado de su crujía. Aquí comienza posiblemente su caída.
Entretando, en la cámara del bar (abajo) se ven los efectos de la subida de intensidad de la tormenta porque las sombrillas, sillas y jardineras han caído; pero, insisto, no se trata de un viento huracanado dado que los pequeños barcos de pesca que está junto al local aparecen intactos y sin signos de violencia. En la parte alta, a la izquierda, podemos ver el rótulo con la hora de máxima intensidad, las cuatro y seis minutos de la madrugada, que coincide con la grabación de la cámara de seguridad. A estas alturas es probable que el palo ya esté en el agua, pero todavía con la luz de tope encendida y el barco todavía a flote.
TEORÍA DE LAS VÍAS DE AGUA
Ese inmenso palo en el agua, movido por la olas y el viento, debió golpear el lado de estribor del velero, provocándole una o dos vías de agua de gran tamaño que lo hicieron naufragar en menos de cinco minutos. En esta otra foto de abajo vemos que las lonas de los barcos del puerto siguen casi intactas.
PROFUNDIDAD DEL PECIO
Que el pecio esté a cincuenta metros de profundidad es normal, pues derivó mientras se hundía en la dirección de la tormenta que, como hemos podido comprobar en la fotos, venía del Este; y, en esa dirección, lo arrastro hasta que tocó fondo y paró su deriva.
En el próximo artículo de mi blog en la Gaceta Náutica analizaré en profundidad este tremendo naufragio, con resultado de seis muertes, ocurrido a bordo de un inmenso barco de vela, que, como el Titanic, parecía insumergible. Para ello me desplazaré al lugar del suceso la póxima semana.
Mi primera hipótesis, con las pruebas ahora disponibles y sujeta como es lógico a revisión en función de las evidencias que puedan aparecer en las próximas horas, es que el palo, al caer al agua junto al velero, le provocó varias vías de agua. Ha pasado muchas veces, y siempre ocurre cuando no da tiempo a cortar los obenques, estays, burdas y drizas, para que el mástil se aleje del casco. Pero, como he dicho, lo estudiaremos con más detenimiento en futuros capítulos de esta sección.