Hay días en que uno se despierta y no da crédito a cosas que ve, lee o le cuentan. Hoy ha sido uno de esos días, porque estamos en lo de siempre. Hay un temporal, se rompen cosas y todos nos hacemos cruces porque «esto no había pasado nunca». Los que más cara de asombro ponen son nuestros gloriosos mandatarios, esa gente que levita sobre gruesas alfombras, circula en preciosos coches blindados insonorizados de a 100.000 la unidad y, absortos en mantener el empleo en vez de ocupados en hacer bien lo que les hemos mandado, parecen ignorar que cuando les votamos les otorgamos nuestra confianza y les damos la orden de que cumplan con su cometido.
Esta diatriba viene a cuento de que se ha ido a la porra otro dique de Ports IB, esta vez en Cala Rajada, donde las olas han hecho un boquete por el que podría pasar un autobús. Estaba leyendo un ejemplar de la prensa local y realmente me partía de la risa la cara de pasmo de las «autoridades locales, insulares y autonómicas» que acudieron a hacerse la foto mirando el boquete y anunciar que será reparado por la vía de urgencia. A ver si esta vez es cierto y no pasa lo mismo que con el emisario de Talamanca.
El escándalo no reside, en mi opinión, esta vez indignada y no humilde como digo en ocasiones (más que nada por aquello de quedar bien), en que se haya roto un dique, ni en que estos señores se hayan enterado de que existe un dique porque se ha roto, ni en que prometan que lo van a arreglar por vía de urgencia. El escándalo reside en que no se realizaban inversiones de importancia en ese dique desde hace unos 40 años.
Señores políticos, por si no se han dado cuenta, se trata de una infraestructura expuesta a los elementos que no sólo protege embarcaciones e instalaciones que valen un dineral, sino también vidas humanas, pero claro, como eso de la náutica es de pijos y eso a ustedes les importa una higa, tanto el actual equipo de gobierno como los anteriores han ignorado una estupenda red de puertos de gestión directa.
Y no me digan que es que esto no se veía venir. Si hago memoria, seguro que en los últimos 10 o 20 años sacamos al menos dos o tres diques de puertos pertenecientes a Ports IB que se han ido a la porra. Así, a bote pronto, se me ocurren los de Bonaire y Puerto de Andratx, uno de gestión directa y otro de gestión indirecta.
¿Saben que ocurre? Pues que el Mediterráneo, cuando se cabrea, tiene malas bromas y que ustedes sólo se preocupan de Ports IB a la hora de renegociar los cánones de los puertos de gestión indirecta con el único fin de conseguir pasta para disimular el déficit y deterioro que su pésima gestión ha provocado en lo que debería ser una modélica red de puertos públicos en el enclave náutico más importante del Mediterráneo, eso que algunos llaman Baleares y ustedes parecen pensar que es «sa finca».
Señores gobernantes, empleados nuestros, el mar es vida, el mar es riqueza, el mar es cultura, pero si no se le respeta, se enfada, y cuando se enfada, hacen falta infraestructuras en buenas condiciones. Creo que todos los ciudadanos, residentes, visitantes y navegantes de Baleares les agradeceríamos que tomen nota porque a pesar de que ustedes piensen lo contrario, esto es muy serio.