Ayer se dio la salida a la primera etapa de la 23ª Mini Transat EuroChef, la regata transatlántica en solitario. Las 90 embarcaciones participantes partieron de Les Sables d’Olonne con una brisa del NO de entre 16 y 20 nudos. Después de rodear la baliza de barlovento, todos pusieron rumbo hacia el mar abierto.
Entre los 90 regatistas que afrontan la aventura se encuentran dos representantes de las Islas Baleares. Felip Moll, del Club Náutico Ciutadella, se ha convertido en el primer menorquín que toma la salida de la Mini Transat, mientras que José Linares, del Club Nàutic Sa Ràpita, navega a bordo del Vamos vamos, el barco con el que Nacho Postigo completó la Mini en 2015.
La primera etapa les llevará a Santa Cruz de la Palma (Canarias) después de navegar 1.350 millas náuticas. La segunda etapa saldrá, en principio, del puerto canario el 29 de octubre rumbo a Guadalupe, en el Caribe. El recorrido será de unas 2.700 millas y los barcos deberán cruzar el Atlántico.
La organización de la regata decidió aplazar 24 horas la salida de la prueba a causa de una tormenta que se aproximaba por las costas de Portugal. El frente de tormenta ya ha pasado, pero los patrones deberán enfrentarse a un primer tramo que puede ser fundamental para el desarrollo de la regata.
La aproximación al Cantábrico promete ser complicada en términos de estrategia. Lograr llegar cuanto antes al Cabo Finisterre resultará fundamental porque, según el parte meteorológico, es probable que los primeros clasificados encuentren buen viento hacia Canarias, mientras que los más atrasados deban lidiar con duras condiciones de ceñida.
En estos momentos, los patrones han navegado el primer centenar de millas. El Avellà de Felip Moll se encuentra en el puesto 22 de la categoría de embarcaciones de serie, mientras que el Vamos vamos de José Linares, situado algo más al norte, está en la posición 33.
Ambos encaran una dura prueba de resistencia, pues tienen por delante casi 4.000 millas a bordo de un pequeño barco de 6,5 metros de eslora y no pueden contar con ayudas tecnológicas a la navegación. De hecho, los patrones deben entregar sus teléfonos móviles antes de la salida.
La previsión establece que los regatistas comiencen a llegar a partir del próximo 3 de octubre a La Palma.