Restos de un contenedor colgando del alerón de babor del Nápoles. Fotografía: puentedemando.com
Los restos de un contenedor convertido en un amasijo de chatarra arrugada colgando del alerón de babor y una gran cicatriz en la amura de la misma banda del Nápoles, un ferry que cubre para Baleària la ruta Málaga-Melilla dan fe de la violencia del choque entre este buque y el portacontenedores Laust Maersk, según muestran las imágenes publicadas por puentedemando.
El incidente ocurrió cerca de las 3 de la madrugada en la noche del viernes al sábado en aguas del Mar de Alborán. Ya se ha puesto en marcha una investigación para averiguar las causas del abordaje. Afortunadamente, pese a los desperfectos en el ferry, no se registraron heridos en el incidente y tanto los pasajeros como la carga fueron desembarcados con normalidad en el puerto de Melilla a la hora prevista, las 6,30 de la mañana del sábado. En cualquier caso, la colisión provocó una crisis de nerviosismo entre muchos pasajeros que, según recogen los testimonios, escucharon en mitad de la noche un gran estruendo y vieron cómo todo se caía al suelo.
La colisión dejó una profunda cicatriz también en la amura del ferry de Baleària. Fotografía: puentedemando.com
Salvamento Marítimo movilizó el avión Sasemar 305 y el buque SAR Mastelero para intentar localizar y recuperar un contenedor vacío que había caído al mar. El portacontenedores Laust Maersk regresó tras la colisión al puerto de Gibraltar, del que había zarpado horas antes.
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