Los agentes de inspección pesquera de la Dirección General de Pesca y Medio Marino han extendido un acta de denuncia, interpuesta por guardapescas, por la captura de meros por debajo de la talla reglamentaria en la Reserva Marina de la Punta de sa Creu, en Formentera.

Esta infracción está considerada como grave y puede implicar una multa de hasta 30.000 euros. Los guardapescas de la reserva sorprendieron a un buceador con dos ejemplares antirreglamentarios en la zona de reserva integral, donde está absolutamente prohibido pescar.

Durante el mes de agosto, los agentes de inspección pesquera del Servicio de Recursos Marinos han extendido ya, con esta, hasta ocho actas por presunta infracción a pescadores, tanto profesionales como recreativos, en las reservas marinas de las Illes Balears.

De hecho, dos días antes y en la misma reserva, se interpuso una denuncia por pescar en el curricán sin autorización. En la Reserva Marina de los Freus de Eivissa y Formentera se extendió otra acta el pasado día 13 de agosto por pesca submarina; y otra el día 21 en la Reserva Marina del  Freu de sa Dragonera, por el mismo motivo.

Por otro lado, en las reservas marinas del Llevant y del Migjorn de Mallorca, así como en la de la Badia de Palma, los guardapescas e inspectores de Pesca denunciaron a varias personas por infringir la normativa de pesca. La Dirección General de Pesca y Medio Marino es la encargada de tramitar estas denuncias, según lo que dicta la Ley 6/2013, de 7 de noviembre, de pesca marítima, marisqueo y acuicultura en las Illes Balears.