Un ferry navegando en la bahía de Palma
Los sistemas de monitorización de la calidad del aire instalados por la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) en los puertos de las islas apuntan a una correlación entre la contaminación y la actividad portuaria en la entrada y la salida de los buques. Así lo ha confirmado Manuel Vellón, responsable de la empresa Suez Air Quality & Climate que se encarga del sistema de monitorización de la calidad del aire que ha puesto en marcha la APB. Vellón ha señalado que “por una cuestión de prevalencia de actividad, evidentemente la mayor cantidad de eventos contaminantes están correlacionados con los ferris, pero también se han detectado casos de cruceros y de descarga de graneles”.
Vellón ha sido uno de los ponentes de una jornada sobre la calidad del aire en la ciudad de Palma que ha tenido lugar hoy en la sede institucional de la APB.
Al encuentro han acudido, entre otros, Francesc Antich, presidente de la APB; Ramon Perpinyà, presidente de EMAYA; Maria Antònia Garcias, Consellera de Territorio del Consell de Mallorca y Josep Malagrava, director general de Energía y Cambio Climático.
El sistema de medición de calidad del aire de la APB cuenta con 25 puntos instalados en los cinco puertos de interés general de Baleares que monitorizan en tiempo real los posibles incidentes.
Manuel Vellón ha explicado que “el principal contaminante del que hacemos seguimiento es el del dióxido de azufre, también los óxidos de nitrógeno y el material particulado” y ha aclarado que los resultados de calidad del aire en los puertos de Baleares están claramente dentro de los parámetros permitidos por la legislación.
Este sistema proporciona datos validados y certificados desde septiembre de 2019. “Durante la pandemia se apreció una reducción importante y con la recuperación de la actividad económica volvemos otra vez a tener niveles más elevados”, ha asegurado el responsable de Suez Air Quality & Climate.
Josep Malagrava, director general de Energía y Cambio Climático, ha apuntado el dato de que la movilidad marítima supone entre un 15 y un 18 por ciento de las emisiones totales de Baleares, pero ha añadido que “somos una comunidad insular y el transporte marítimo es clave, esencial y estratégico no solo para transportar pasajeros, si no también para importar y exportar mercancías”. Es decir, que entre el 82 y el 85% de las emisiones de Baleares no guardan relación con la actividad marítima, a pesar de que, de un tiempo a esta parte, es una de las más fiscalizadas por los medios y la opinión pública.
Sobre la actividad de los cruceros, Malagrava ha señalado que “debemos ir hacia un decrecimiento que será clave para la sostenibilidad” y ha remarcado la importancia de que el sector privado esté comprometido con la sostenibilidad del modelo turístico.
Por su parte, Francesc Antich ha valorado que el Govern haya llegado a un acuerdo con las navieras de los cruceros turísticos “es algo muy importante porque, en principio, con la legislación vigente, desde los distintos puertos se tiene que dar cobertura a todos los cruceros que lo pidan mientras haya sitio”, ha dicho.
Antich ha señalado que “nuestra prioridad es medir de la mejor manera la posible contaminación del aire para tomar las mejores decisiones de futuro”. En este sentido, el presidente de la APB ha comentado que se han mejorado los sistemas de medición y a la vez se están poniendo en marcha iniciativas como el cold ironing que permitirá que los ferris se puedan enchufar a la corriente eléctrica durante sus estancias en puerto.
La APB espera que en 2024 haya dos sistemas cold ironing en Ibiza, uno en Palma, uno en Mahón y otro en Alcudia. “Los hemos pedido de forma conjunta con el puerto de Barcelona en una convocatoria europea y podemos recibir un 40% del coste. Supondrá una inversión de unos 12 millones de euros de la APB y permitirá eliminar ruidos en los puertos y también quitar impacto en el aire porque el combustible sería más amable” ha expuesto Francesc Antich.