El Burburín II con Miguel Cabrer como patrón es el nuevo campeón de España de Pesca de Altura Curricán tras la competición organizada el pasado fin de semana por el Club de Pesca Marina Cala d’Or. Veintiocho barcos participaron en la prueba, seis de ellos procedentes de la Península para disputar la competición que se celebra bajo la modalidad de pesca y suelta y que puntuaba para la clasificación para formar parte del equipo español en el mundial de la especialidad.

El Burburín II fue el que más piezas consiguió acreditar durante los dos días de competición, viernes y sábado. En concreto, el primer día el barco Miguel Cabrer subió a bordo 8 albacoras y un listado y el segundo, 12, es decir, un total de 21 piezas.

Miguel Cabrer, patrón del equipo ganador, se mostraba satisfecho con la actuación de su equipo aunque reconocía que “la pesca el primer día fue complicada porque había una calma total, mientras que el segundo día tampoco resultó fácil porque todos los barcos estaban más o menos por la misma zona”. Cabrer se muestra totalmente favorable a esta nueva modalidad de pesca que permite que los pescados sean devueltos al agua después de tomar testimonio gráfico de su captura.

Captura y suelta en el Ulises de Juan Bonet, durante la competición nacional disputada en Cala d'Or.

Esta ha sido, después del evento que se organizó en Pollença hace unas semanas, la primera competición oficial que se disputa con la modalidad de pesca y suelta. En este caso, la puntuacíon no tiene en cuenta el peso de las capturas, sino solo el número de piezas, independientemente de su peso. No sirve pescar grandes piezas, sino sumar capturas, que deben ser subidas a bordo y puestas en libertad inmediatamente tras haber acreditado gráficamente la pesca.

Cada barco podía portar de tres a seis pescadores con un máximo de dos cañas por licencia sin sobrepasar las siete cañas en acción en cada embarcación. Los participantes tenían como especies objetivo las albacoras, los listados, las agujas imperiales y las llampugas. La pesca de cualquier otra especie estaba absolutamente prohibida. Cada albacora y listado valía 10 puntos para el equipo autor de la captura. Cada aguja imperial o llampuga sumaba 15 puntos para el barco autor de la pesca.

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