El presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, realizó ayer una visita institucional a la Autoridad Portuaria de Baleares (APB), donde fue recibido por el presidente Francesc Antich y su equipo directivo.
El encuentro se enmarca dentro de la ronda de contactos que está realizando Rodríguez Dapena con los gestores de los puertos de interés general del Sistema Portuario Estatal. Tras firmar en el libro de honor de la APB, Rodríguez Dapena recibió de manos de Antich una metopa conmemorativa de la visita que coincide con el 150 aniversario del organismo portuario.
El presidente de Puertos del Estado llevó a cabo un recorrido por el puerto de Palma, visitando la nueva infraestructura de conexión eléctrica en media y baja tensión para que los ferris atracados puedan reducir las emisiones de gases y ruidos generados por sus motores durante la escala y las operaciones de desembarque y embarque. Un avance tecnológico que el presidente de Puertos del Estado ha calificado de innovador y que el presidente de la APB enmarca dentro “del compromiso asumido por los puertos en su lucha contra el cambio climático”.
Tras reunirse con el comité de dirección de la APB, con el que conoció de primera mano los proyectos y retos que afectan a los puertos de Palma, Alcudia, Maó, Eivissa y la Savina, mantuvo un encuentro con algunos de los principales operadores portuarios de las islas.
Singularidad insular
Entre los temas tratados destacó la identificación del plan estratégico de la APB con las directrices y líneas generales del Marco Estratégico del sistema portuario español, que se prevén aprobar ambos en 2022. La aplicación de políticas de gestión sostenible y de transición ecológica, así como la transformación de las terminales portuarias para que se alimenten exclusivamente de energías renovables es uno de los puntos clave.
La necesidad de adaptar estructuras y recursos humanos a la singular gestión de cinco puertos en cuatro islas, la ordenación de las líneas regulares de transportes de pasajeros y mercancías, la oportunidad de promover un turismo de cruceros más sostenible, la situación del sector náutico y la industria de la reparación y mantenimiento de embarcaciones, así como los futuros desarrollos del puerto de Palma, han sido otros de los aspectos tratados con los técnicos de la APB y la comunidad portuaria de las Islas Baleares.