El próximo lunes día 8 de noviembre empezarán las obras de mejora de la primera línea del Port de Polllença para mejorar la eficiencia energética y las instalaciones portuarias. El proyecto, impulsado por Ports IB, supone el reacondicionamiento del aparcamiento y la zona de pérgolas. La parte afectada está enclavada entre el Paseo Saralegui y el muelle de ribera de Port de Pollença. Esta zona reparte su superficie entre una zona asfaltada de aparcamiento de vehículos, y una zona de peatones, donde se ubican un conjunto de pérgolas bajo las cuales se sitúan una serie de casetas de venta de tickets
La actuación consiste en reasfaltar el aparcamiento y renovación de pavimentos, también la demolición de las casetas de venta de tickets existentes y construcción de 12 casetas nuevas. Se acondicionarán las pérgolas existentes para instalar en las mismas paneles solares para alimentación de dos puntos de carga de vehículos eléctricos. Todo el proyecto supone una inversión de aproximadamente 800.000 euros, con un plazo de ejecución de 4 meses.
Para poder ejecutar estas obras será necesario el cierre de la zona de aparcamiento regulado con ORA que hay en esta zona. Así, a partir de lunes día 8 de noviembre el aparcamiento permanecerá cerrado.
Por otra parte, los pavimentos de peatones de esta zona presentan defectos de conservación. Se procederá a la demolición del pavimento existente en aceras, y a la colocación de uno nuevo con tratamiento antisuciedad que dé continuidad al conjunto. En esta intervención se mejorará al mismo tiempo la red actual de pluviales, optimizando su capacidad, dado que actualmente funciona de una forma inadecuada.
Las casetas actuales de venta de tickets presentan un aspecto muy envejecido, además, los módulos son pequeños y no tienen la climatización necesaria para trabajar en verano, por lo cual se demolerán las 10 casetas existentes y se construirán 12 nuevas estructuras con mejoras de aislamiento y eficiencia energética.
Respecto a las pérgolas existentes, se aprovecharán al máximo, procediendo a su adaptación para posibilitar la instalación de aproximadamente unos 80 m² de placas fotovoltaicas. Gracias a los módulos previstos se generarán un total de 22.437 kWh a lo largo del año, evitando así unas emisiones de CO₂ de 13.457 kg por año.