La naviera FRS trabaja ya en el plan de reflotamiento para poder remolcar el San Gwann, embarrancado desde la noche del sábado en el islote Es Malvi Pla, frente a la bocana del puerto de Ibiza.

FRS dispone de 72  horas desde la comunicación del incidente para presentar el plan ante Capitanía Marítima. Mientras, la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos, Ciaim, un organismo dependiente del Ministerio de Transportes, trabaja ya para esclarecer las causas del siniestro. Sin embargo, sus conclusiones solo se emitirán a largo plazo.

Ayer el conseller de Mobilitat, Josep Marí, se refería a inconcretos “problemas técnicos” como origen del accidente, mientras el capitán marítimo de Ibiza y Formentera, Luis Gascón, reconocía que el Fast Ferry navegaba en el momento de la colisión, sobre las 10 menos cuarto de la noche del sábado, a una velocidad elevada “la normal en ese tramo de la ruta”. Recordemos que el San Gwann, que cubría desde hace solo dos meses la ruta entre Ibiza y Formentera para FRS, tiene una velocidad de crucero de 34 nudos, unos 63 kilómetros por hora. Según la información facilitada por Salvamento Marítimo, en el momento de la colisión en la zona había una leve marejada con olas de entre metro y metro y medio.

La colisión del San Gwann contra el islote se cerró finalmente con una cifra de 25 heridos de diversa condición entre pasajeros y tripulantes. El herido más grave fue un niño de 10 años, que perdió mucha sangre en el primer momento tras la colisión. Fue trasladado en helicóptero a la UCI Pediátrica de Son Espases, donde permanece ingresado, aunque está estable y no se teme por su vida, según la información facilitada desde el Govern.

También permanecen ingresados otros tres heridos en el accidente, dos hombres y una mujer, con diversos politraumatismos, aunque su situación se califica de menos grave. El resto de afectados ya ha sido dado de alta.

La naviera FRS ha emitido un comunicado en el que informa de que no existe riesgo de vertido ni de contaminación de las aguas y que está llevando a cabo las actuaciones necesarias  para asegurar la posición del buque hasta su reflotamiento. Los pasajeros reconocen que la actuación de la tripulación del San Gwann fue ejemplar tras la colisión y atendieron en todo momento a los pasajeros hasta su evacuación, incluso aunque algunos de los marineros estaba también herido.