Hexápodos ecológicos, realizados con un hormigón especial que facilita la proliferación de la vida marina, serán los responsables de proteger de los temporales el castigado dique del puerto de Cala Rajada. 

El objetivo de las obras que se realizan en la actualidad en el puerto del municipio de Capdepera es asegurar la estabilidad estructural del dique, así como reducir el rebasamiento del puerto ante las grandes olas que golpean el puerto cuando hay temporal para mejorar la operatividad de estas instalaciones. Esta actuación empezó el mes de febrero y tiene previsto un plazo de ejecución de doce meses.

Actualmente se está haciendo una prueba en seco que simulará un talud de rompeolas natural en la explanada interior del puerto. Este ensayo se lleva a cabo con los mismos equipos que se utilizarán en la colocación definitiva de los hexápodos de hormigón ecológico.

Los hexápodos esperan en tierra el momento de su definitiva colocación en el mar para proteger el dique.

Una vez acabadas estas pruebas se colocará de manera definitiva el talud de protección, que constará de un manto de una capa de piezas de hormigón conocidas como hexápodos que están fabricadas con hormigón ecológico con la incorporación de un producto llamado ECOncrete que facilita la proliferación de vida marina. La colocación de estos bloques de hormigón se tiene que hacer de forma muy precisa para que queden ubicados correctamente para proteger del oleaje y reducir los problemas de agitación dentro del puerto.

Las obras de refuerzo del dique suponen una inversión de 4,8 millones de euros que se añaden a los 0,6 millones ya destinados a la estabilización del acantilado que se ejecutó antes del verano.

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