Poon Hill S.L. gestionará los puestos de amarre en la zona del varadero de’n Reynés en el muelle de Levante del puerto de Mahón. El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) ha acordado otorgar a esta empresa una autorización de ocupación de dominio público para la gestión de este espacio.
La APB tenía pendiente desde hace más de un año la adjudicación de este concurso público de gestión de puestos de amarre en la zona del varadero de’n Reynés en el muelle de Levante del puerto de Mahón. La superficie total de la concesión abarca 11.000 metros cuadrados de espejo de agua y 247 metros de línea de atraque que están ubicados en la zona entre el restaurante Amarre y la Sirenita.
La explotación consiste en la gestión de 48 amarres para esloras comprendidas entre los ocho y los 30 metros de embarcaciones recreativas, así como el suministro de agua, energía eléctrica, telefonía y retransmisión de datos.
Los pliegos del concurso establecían de salida una tasa de ocupación de 107.120 euros y una tasa de actividad de 4% sobre el volumen de negocio. La oferta ganadora ha propuesto adicionalmente una cantidad fija anual de 130.000 euros en concepto de mejora de las tasas de ocupación y de actividad que se suma a las cantidades anteriores.
La mercantil Poon Hill, que gestionará la explotación de esta superficie durante el período de dos años, prorrogables por un máximo de un año más, tiene sede en Barcelona pero con una fuerte vinculación con Baleares.
Uno de sus administradores, Juan José Costa, lo es también de otras entidades como Marina de Formentera, entidad que ha gestionado durante muchos años la dársena de poniente de La Savina y de Pitiusa de Ecología, adjudicataria de las labores de control de los fondeos de embarcaciones deportivas en Ibiza y Formentera.
Cuatro licitantes se habían interesado por esta concesión, entre ellos el Club Marítimo de Mahón, una entidad que hasta la fecha estaba a cargo esta zona del puerto menorquín. El club náutico deberá desalojar estas instalaciones pero todo apunta a que podrá mantener su actividad gracias a otro concurso convocado por la APB.
La histórica entidad menorquina ha sido la única en presentar oferta para la gestión de una lámina de agua de 19.167 metros cuadrados y 165 puestos de atraque destinados a barcos de ocho a quince metros de eslora en el Muelle de Levante, frente a las instalaciones de su sede social.