“La temporada ha sido buena teniendo en cuenta la situación de la que veníamos, pero la actividad ha descendido en torno a un 15% en relación a la de 2019;  compararnos con el desastre del año pasado no tiene sentido”. José María Jiménez, presidente de la comisión de chárter de la Asociación Provincial de Empresas Marítimas, afirma que el sector de alquiler de embarcaciones ha logrado sobrevivir a la pandemia, pero no comparte los mensajes de euforia de las patronales náuticas.  

“No ha sido un mal año, es verdad; sin embargo, sigue habiendo empresas muy tocadas, por no hablar de las que se fueron de Baleares o se vendieron a precios bajos en los momentos más difíciles”, señala Jiménez, quien tampoco ve que se haya producido un cambio sustancial en el perfil de los clientes a raíz de la crisis sanitaria: “El 98% es cliente con titulación, lo que nos indica que no es nuevo; sí se ha consolidado, en nuestro caso, la clientela local”.

El presidente de la comisión de chárter de Baleares advierte que, contrariamente a lo se pueda pensar, el chárter no tiene nada que ver, ni en volumen ni en actividad, con otros negocios vinculados al turismo, como el alquiler de viviendas vacacionales. “No es comparable. El nuestro es un mercado con mucha competencia y muy limitado, precisamente, por las titulaciones. Hay ciudadanos de varias nacionalidades que no pueden acceder legalmente a nuestro servicio porque sus licencias para gobernar embarcaciones no están reconocidas. La falta de claridad en este asunto está provocando que algunas aseguradoras denieguen siniestros interpretando a su manera la normativa sobre titulaciones”, explica Jiménez, quien, no obstante, admite que “el sector ha recuperado la confianza perdida en la temporada de 2020”.

Durante el verano de 2021 también hubo momentos “duros”, como cuando Alemania aumentó las restricciones para los turistas que se desplazaran a Baleares. “En julio vivimos una semana negra, con muchas cancelaciones de familias debido a que, por entonces, aún no estaban vacunados los hijos, pero al final podemos hacer un balance positivo”.