El Club Nàutic de Portocolom (CNP) recuperará los días 29 y 30 de mayo su antigua trobada de navegación tradicional con la participación de una treintena de llaüts y botes de vela latina radicados en el puerto de la localidad y procedentes del Club Nàutic Cala Gamba, considerado el “museo flotante” de las embarcaciones patrimoniales de Mallorca.
La concentración, no competitiva, constará de dos jornadas: una dedicada a los armadores que hacen posible el mantenimiento de estas embarcaciones y la otra abierta a los vecinos de Portocolom, a los que se brindará la posibilidad de navegar de manera gratuita, con la sola limitación del aforo disponible, a bordo de los botes y llaüts amarrados en el club, en compañía de sus patrones.
Climent Garau, presidente del CNP, explica que la trobada de este año forma parte del calendario de actividades destinadas a promocionar la náutica y la “cultura de la mar” en Portocolom. “Tenemos uno de los mejores puertos de Mallorca para aprender a navegar y también para realizar encuentros de vela tradicional, natación y piragüismo, cuya práctica queremos fomentar a través de la creación de una nueva sección deportiva”.
La colaboración del Club Nàutic Cala Gamba garantiza una gran participación en la trobada, explica Antoni Antich, responsable de vela del CNP, quien se ocupará de la logística y organización del evento en el mar: “El 29 saldrán a navegar los armadores con sus familiares y amigos, que almorzaran a bordo de las embarcaciones fondeadas. El 30 celebraremos la jornada abierta al público. Los vecinos que se acerquen al club a partir de las 11.30 horas podrán salir a navegar en grupos de tres o cuatro personas, dependiendo de las dimensiones del bote o el llaüt, y aprender cómo funciona el aparejo de vela latina. Esta actividad es gratuita y está limitada únicamente por el aforo de las embarcaciones”.
El CNP dispone de un bote cedido por el mestre d’aixa Joan Cifre, el cual se destina actualmente a la enseñanza de la navegación con aparejo de vela latina mientras se procede a la restauración de otro velero propiedad del club por parte del mismo artesano.
La vela latina ha estado vinculada históricamente a Portocolom, algo a lo que no ha sido ajeno el club, fundado en 1960. “Queremos apostar fuerte por este tipo de barcos por varias razones: una, porque forma parte de nuestra tradición; dos, porque nuestro puerto natural ofrece unas condiciones inmejorables, y tres, porque es el complemento perfecto para nuestras escuelas y secciones vela ligera, ya que nos permite combinar la formación orientada a la competición con la difusión de la cultura marítima y el patrimonio de nuestras islas”, apunta Climent Garau.
Joan Marc Rigo, director del Club Nàutic Cala Gamba, asegura que la recuperación de la trobada es “una buena noticia para la vela latina”. “Es importante –añade– que la flota se mueva por distintos puntos de la geografía mallorquina y que otros clubes tomen la bandera del patrimonio marítimo. Portocolom ofrece un marco muy vistoso y estamos encantados de colaborar y aportar nuestra experiencia en este acontecimiento”.