
Las secciones deportivas del Real Club Náutico de Palma serán las protagonistas de la primera manifestación convocada por la entidad en sus 75 años de historia. La razón no es otra que la negativa de la cúpula técnica de la Autoridad Portuaria de Baleares a tramitar el expediente de ampliación de las instalaciones que el RCNP ocupa en el puerto de Palma desde 1948.
Una marcha formada por regatistas y piragüistas recorrerá el próximo 15 de abril el camino entre el edificio social del club y la sede de la APB en defensa de “la náutica social y el deporte náutico, y en demanda de una legislación que proteja la actividad de los clubes”, según reza el cartel que el RCNP ha colgado en los muros de sus perfiles de Instagram, Facebook y Twitter.
La protesta ha sido comunicada a la Delegación del Gobierno en Baleares. En principio, tendrá una duración aproximada de una hora y media. La idea de los organizadores es que los deportistas trasladen sus embarcaciones y piraguas por el camino del bar pesquero y las aparejen en la explanada peatonal situada frente al edificio de la APB.
La concesión del Real Club Náutico de Palma caducó el pasado 31 de diciembre. La APB le otorgó entonces una ocupación temporal por un periodo máximo de tres año que se renueva anualmente. En un artículo publicado en el diario Última Hora y en la revista oficial del RCNP, Emerico Fuster, su presidente, asegura que este permiso provisional supone un “balón de oxígenon, pero no satisface en absoluto los objetivos del club”.
La Asociación de Clubes Náuticos de Baleares (ACNB) advirtió en su última junta directiva de que la situación de precariedad del RCNP y otros clubes dependientes de la APB es una amenaza directa para la vela y el piragüismo, cuyas licencias se verían gravemente mermadas en caso de que estas entidades no consigan estabilizar sus concesiones.
La asociación de clubes llamó también la atención sobre las ampliaciones recientes de las concesiones de varaderos y empresas mercantiles en el puerto de Palma, en contraste con las trabas constantes con las que se ha encontrado el RCNP en su fallido proceso de renovación.