Los pescadores recreativos de Baleares quieren que se les tenga en cuenta en el calendario de desescalada del confinamiento por la pandemia de COVID-19. En una carta dirigida el pasado 25 de abril a la presidenta del Govern balear, Francina Armengol, el presidente de la Associació Pescadors Illes Balears (APIB), Antonio Cayuela, recuerda que la pesca de recreo, por sus características, está prácticamente exenta de riesgo de contagio y pide que se autoricen cuanto antes salidas durante el fin de semana “de manera solitaria o en compañía de hasta tres miembros de la unidad de confinamiento, en el municipio de residencia o de amarre de la embarcación, y manteniendo una distancia de al menos 5 metros con otros pescadores”.
La APIB considera “salidas” tanto la pesca desde embarcación como submarina y desde la costa, y recalca que esta última se realiza en zonas poco frecuentados “como escolleras, diques de puertos, acantilados”.
Según explica Cayuela en su carta a la presidenta balear, “salir a pescar con caña los fines de semana es una actividad de un gran arraigo cultural que ofrece bienestar a los ciudadanos de la Islas”.
La APIB sostiene que 100.000 ciudadanos de las Islas fueron a pescar de manera recreativa en 2017, al menos una vez, y que el 50% de la población ha pescado alguna vez en su vida. “A pesar de la relevancia social de la pesca recreativa en las Islas, menos del 10% del total de la capturas son de origen recreativo y deportivo”, añade Cayuela.
Los pescadores recreativos creen que es momento no sólo de autorizar, sino de fomentar su afición: “Nos dirigimos probablemente a una nueva realidad social, dónde el fomento de las actividades que ofrezcan un contacto directo con la naturaleza y experiencias alejadas de grandes multitudes, protagonizarán nuestra manera de ocio. La pesca recreativa conecta la gente con nuestro mar, ofrece bienestar, comida, deporte, amistad, empleos y ciencia”.
“Cuando se decida que se puede reanudar la actividad, la pesca recreativa de las Islas estará lista y unida para contribuir a los esfuerzos del Govern Balear para una desescalada segura”, concluye Cayuela.