Miquel Suñer, en el Club Nàutic Sa Ràpita, del que también fue presidente.
Ha sido uno de los grandes líderes sectoriales de la náutica balear de la última década y media, un hombre respetado incluso por quienes defienden intereses o principios diferentes a los suyos. Sus grandes virtudes: saber escuchar y hablar lo justo, generalmente en forma de refranes y dichos populares de cuyo conocimiento parece ser el último depositario. No le ha importado ser políticamente incorrecto siempre que ello significara defender algo en lo que creía. Sus interlocutores y colaboradores durante todos estos años pasados aprecian la sinceridad de su carácter sin dobleces y le reconocen el “gran mérito” de haber contribuido a que los clubes náuticos y marítimos ocupen hoy la primera línea de la representación de la náutica de recreo en Baleares.
Miquel Suñer (Campos, 1941) dejó el pasado mes de junio la presidencia de la Asociación de Clubes Náuticos de Baleares (ACNB) tras casi 13 años. Su trayectoria será reconocida el próximo 9 de diciembre con la Brújula de los Premios Timón que Gaceta Náutica otorga a aquellas personalidades que han ayudado al desarrollo del sector náutico y a la difusión de la cultura de la mar. Otros ganadores de este galardón son el navegante Xisco Estarellas y el juez de regatas Emilio Feliu.
Suñer inició su etapa al frente de la ACNB en 2008, en sustitución de Joan Noguera. Entonces ya era presidente del Club Nàutic Sa Ràpita. Uno de sus mayores logros es haber participado, junto al resto de clubes de Baleares, en en el desarrollo de la ley balear de puertos, una normativa que ha dado estabilidad a las instalaciones de la comunidad autónoma. Pero no todo han sido éxitos, según reconoce el propio Suñer: “Hay cinco clubes de la Autoridad Portuaria que no han renovado sus concesiones. El Molinar, un club centenario, ha perdido su instalación. Y el Club de Vela de Andratx, una entidad emblemática, tiene un futuro incierto. Me quedo con la espina clavada de no haber podido terminar mi etapa habiendo resuelto todos estos asuntos”.
Miquel Suñer dice haber vivido “13 años muy intensos” de los que se lleva una de las mejores experiencias de su vida: “Gracias a la asociación se han conseguido muchas cosas impensables, pero sobre todo me quedo con las amistades que he podido hacer a lo largo de este tiempo”.
El ex presidente de la ACNB tiene buenas palabras para todos los clubes con los que ha colaborado, pero personaliza su gratitud en dos personas: “Joan Oliver, director del Club de Vela de Andratx, que fue mi mentor y siempre ha sido un referente, y Rafael Palmer, gerente de la asociación, que ha hecho una gran labor al frente de la ACNB, buscando siempre la defensa de nuestro colectivo, incluso en situaciones muy difíciles”.
Según Suñer, cada club náutico tiene su manera de funcionar y hay que respetarla. “El valor de la asociación ha sido decantar las ideas comunes del colectivo, aquello en lo que todos coincidimos, y convertirnos en portavoces de esas ideas. La ACNB no está para imponer nada, sino para defender aquello que nos une, que no es poco”, afirma.
El histórico líder sectorial sigue abierto a colaborar con la ACNB en todo aquello que esté en su mano: “Siempre estaré aquí para ayudar y dar mi opinión, aunque estoy convencido de que no hace falta. Antoni Estades (ex presidente del CN Cala Gamba, su sustituto desde el mes de junio) está demostrando ya que es un buen presidente y que la asociación navega a rumbo”.
Los Premios Timón de Gaceta Náutica nacieron en 2016 con el objetivo de reconocer la labor de las personalidades y deportistas más destacados del sector náutico. En sólo seis años de existecnia se han convertido en los galardones anuales de referencia de la náutica de recreo en las Islas. La edición de este año cuenta con la colaboración de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Mallorca, Ports IB, Ports de Balears (APB), Club de Vela de Andratx, Alcudiamar, Port Adriano, Puerto Portals, Bufete Frau y ACNB.