Los Tedax de la Guardia Civil también intervinieron en el ejercicio.
Averiguar sobre el terreno y con un ejercicio práctico qué pasaría si un día de estos aparece una bomba en el Puerto de Palma. Ese era el objetivo del simulacro organizado ayer por la Autoridad Portuaria de Baleares. El ejercicio planteó el supuesto del descubrimiento de un artefacto explosivo colocado junto a un transporte de gasóleo en los muelles Comerciales dentro de las instalaciones portuarias. Durante el ejercicio se activaron el Plan de Protección del puerto de Palma (PPP), el Plan de Emergencia Interior (PEI) y el Plan Interior Marítimo (PIM).
El objetivo del ejercicio es la activación simultánea de los mencionados planes, dar formación a los Bomberos de Palma sobre intervención en incendios en embarcaciones de recreo, así como repasar los riesgos portuarios y las actuaciones y procedimientos de emergencia.
En el simulacro han intervenido la Guardia Civil, con el grupo de perros entrenados de detección del Servicio Cinológico y los artificieros del TEDAX, Bombers de Palma, Grimaldi Logística, la Dirección General de Emergencias del Govern balear, la Delegación del Gobierno, Policía Portuaria, Prácticos de Palma y personal de Conservación de la APB.
Tras una llamada ficticia de aviso de bomba a una naviera se activó el servicio cinológico y los TEDAX de la Benemérita, que detectaron dos artefactos explosivos adosados a una cisterna de 30 toneladas de gasóleo en los muelles comerciales del puerto de Palma. Uno de ellos estalló sin víctimas, causando un vertido al suelo, a la mar y un incendio.
Los canes del Servicio Cinológico de la Guardia Civil fueron los encargados de localizar las bombas.
Acto seguido intervinieron los Bombers de Palma, controlando el incendio y el vertido al suelo y cubriendo la zona con espuma de baja expansión.
En cuanto la zona se dio por asegurada, intervinieron los equipos de apoyo a la emergencia de la APB, constituidos por el personal de Conservación y de la Corporación de Prácticos del puerto de Palma, quienes, en circunstancias reales, se encargarían de tender la barrera anticontaminación en el testero de los muelles Comerciales.
Una vez finalizado el ejercicio, se llevó a cabo una reunión con todos los efectivos que habían participado en el simulacro a fin de establecer las conclusiones y preparar así un informe con las posibles mejoras de los diferentes procedimientos aplicados.