El proyecto “Evaluación del estado actual del medio marino en la Bahía de Pollença” elaborado por la empresa Centre Balear de Biologia Aplicada (CBBA) revela que la playa de Pollença no es apta para el baño debido a la alta contaminación por los vertidos de aguas residuales en diversos puntos.

El completo análisis microbiológico, al que ha tenido acceso Gaceta Náutica, ha sido solicitado por la Associació per a la Defensa del Port de Pollença (ASDEPP). Para llevar a cabo este estudio integral se han realizado muestreos a lo largo de las playas de Albercutx y Llenaire, en una serie de puntos situados a menos de 500 metros de la costa y un punto de referencia en una zona más alejada (Punta Avanzada).

La toma de muestras tuvo lugar en diferentes días, diez en total, desde mayo a septiembre 2021 (ambos inclusive) con la intención de determinar la calidad del agua, del sedimento marino y de la arena de playa.

Los resultados demuestran que durante el periodo de muestreo se han producido fenómenos de contaminación fecal en numerosas ocasiones, todos ellos con “concentraciones por encima de los valores de referencia de la Conselleria de Salut i Consum para considerar las aguas aptas para el baño”, según recoge el informe.

Los resultados del análisis microbiológico demuestran que se han producido fenómenos de contaminación fecal (enterococos intestinales y Escherichia coli) en numerosas ocasiones durante el periodo de muestreo. Los lugares con mayor contaminación son los denominados Punto 4 y Punto 6, donde se han registrado cinco episodios de contaminación con concentraciones por encima de los valores de referencia de la Conselleria de Salut i Consum para considerar las aguas aptas para el baño.

El Punto 4 del muestreo está situado al lado del dique principal del club náutico, junto a la costa. El Punto 6 está en la desembocadura del torrente de Sant Jordi. En el resto de lugares del muestreo también se han detectado concentraciones de microorganismos fecales superiores a los 100ufc/100ml, pero por debajo de los valores de referencia para considerar el agua no apta para el baño.

El punto 7 se corresponde con el lugar del vertido masivo ocurrido a principios de julio de 2021 en una tubería submarina que los vecinos creían clausurada. En las jornadas posteriores a este episodio se recogieron muestras con niveles muy altos de contaminación 553ufc/100ml, pero el resto de muestras tomadas por CBBA a instancias de ASDEPP han dado valores cercanos a cero.

En las muestras no se ha encontrado ninguna especie tóxica. La mayoría de resultados son de especies típicas de zonas cercanas a la costa, más o menos resguardadas a excepción de alguna especie de aguas más exteriores En general se observan recuentos bajos, lo que puede indicar a priori que no parece que el fitoplancton sea el responsable de la perdida de trasparencia del agua de la Bahía.

El informe recomienda realizar un estudio de dinámica litoral y realizar simulaciones para ver el efecto que puedan tener las diferentes construcciones de la costa que puedan influir en la renovación del agua y el balance de sedimento. Los resultados del sedimento para los metales pesados indican que se trata de un sedimento en buenas condiciones.

Respecto al origen de la contaminación, el estudio señala que “debido a la localización de los puntos de muestreo, todos ellos muy cercanos a la costa y la mayoría situados dentro de zonas de baño restringidas al tráfico marítimo, se podría deducir que el origen de esta contaminación proviene de algún vertido terrestre”.

Las conclusiones del informe respaldan las quejas de ASDEPP que insiste en que la Bahía del Port de Pollença se está degradando progresivamente debido a unos vertidos contaminantes que, aparte de la turbidez y los malos olores, están matando toda la fauna y flora marina.

Para analizar las presiones antrópicas que sufre la bahía de Pollença la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio convocó el pasado mes de septiembre, una mesa de trabajo en la que están presentes representantes de diferentes administraciones implicadas, municipales, autonómicas y estatales, así como varias asociaciones y centros de investigación.