El fabricante noruego de equipos marinos, Wärtsilä, ha anunciado que ha recibido su primer pedido para instalar varios sistemas de depuración de gases de exhaustación (scrubber) preparados para su adaptación para la captura de carbono a bordo (CCS ready). Según dicha empresa, la entrega estaría prevista para este año 2023, según informa la Asociación de Navieros Españoles, Anave.

El pedido incluye cuatro scrubbers de ciclo abierto CCS ready de 35 MW para otros tantos buques portacontenedores con capacidad para 8.200 TEU, más de 300.000 metros cúbicos de carga, que se están construyendo en astilleros asiáticos. Según Wärtsilä, el proyecto incluye trabajos adicionales alrededor de los sistemas de depuración en términos de empacho, optimización de servicios y sistemas de control, para permitir la futura incorporación de un sistema completo de captura de carbono a bordo.

Wärtsilä está probando actualmente un sistema con una tasa de captura de carbono prevista de un 70% y llevará a cabo una instalación piloto durante el próximo año. Según el responsable de la división de Tratamiento de Gases de Escape para Asia de dicha empresa, Scott Oh, “la captura de carbono a bordo es una de las soluciones clave para permitir la descarbonización marítima en un breve plazo de tiempo, y esperamos seguir avanzando en nuestra tecnología”.

Los sistemas de captura de carbono a bordo de los buques recuperan el CO₂ de los gases de escape de los motores, evitando su emisión a la atmósfera. El CO₂ capturado se almacena a bordo y posteriormente se descarga en puerto para su uso en industrias que lo puedan reutilizar, como por ejemplo la producción de combustibles ecológicos.

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