La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) de EE.UU. publicó ayer el informe preliminar sobre la colisión del portacontenedores Dalí contra el puente Francis Scott Key, el más grande de Baltimore, con 2,6 kilómetros de longitud, el pasado 26 de marzo. La colisión provocó la muerte de seis trabajadores y el colapso de la parte central del puerte que bloqueó durante semanas la salida de grandes buques mercantes en el quinto puerto más importante de Estados Unidos.

El Dalí, de 300 metros de eslora, administrado por Synergy Group y alquilado a la naviera danesa Maersk, una de las más importantes del mundo, había experimentado apagones eléctricos unas diez horas antes de zarpar del puerto de Baltimore y otros dos cortes poco antes de estrellarse contra el puente, según consta en el informe preliminar de los investigadores federales.

El primer corte de energía se había originado el día anterior después de que un miembro de la tripulación cerrara por error una compuerta de escape mientras realizaba tareas de mantenimiento, lo que provocó que uno de los motores diésel del barco se detuviera.

Poco después de zarpar de Baltimore a primera hora del 26 de marzo, el barco se estrelló contra una de las columnas de soporte del puente porque otro corte de energía, claramente captado en un vídeo difundido tras los primeros momentos de la tragedia, hizo que perdiera gobierno y propulsión.

La NTSB concluye que el apagón fatal se produjo unos cuatro minutos antes del accidente cuando los interruptores eléctricos encargados de prevenir cortocircuitos, se dispararon inesperadamente causando una pérdida de energía en todas las luces a bordo y en la mayoría de los equipos cuando el buque navegaba a un kilómetro del puente.

La tripulación del Dalí consiguió restablecer el suministro eléctrico, pero se produjo otro apagón a unos 320 metros del puente, que detuvo simultáneamente las tres bombas de dirección, por lo que el timón quedó bloqueado y la embarcación sin propulsión ni gobierno. 

En este cuadro del informe preliminar de la NTSB se detalla la sucesión cronológica que provocó la colisión del 'Dali' contra el puente Francis Scott Key.

Ayer, el Puerto de Baltimore anunció que el canal de acceso limitado de Fort McHenry ha reabierto oficialmente con una profundidad disponible de 13,7 m para el tráfico de embarcaciones comerciales de gran porte durante diez horas al día. Otros tres canales temporales poco profundos permanecerán abiertos de manera simultánea para buques de menor calado.

El lunes se llevó a cabo una demolición controlada con explosivos para retirar de forma segura una gran sección del puente que descansaba sobre la proa del Dalí, aprisionando el barco contra el fondo.

La previsión es que esta misma semana el portacontenedores siniestrado pueda ser retirado de la zona y que el canal principal del puerto, de 15 metros de profundidad, pueda abrirse de nuevo al tráfico de grandes buques a finales de este mes. La rapidez e implicación de todos los estamentos civiles y militares estadounidenses en los trabajos de retirada de los grandes fragmentos del puente ha permitido reducir considerablemente un bloqueo que no tenía una fecha de conclusión determinada y al final se ha logrado recuperar en dos meses.

Sin embargo, queda abierto un complicadísimo proceso judicial por este percance en el que aseguradoras, corporaciones e instituciones tendrán que dilucidar las repercusiones económicas por un bloqueo comercial que, según los primeros datos ha hecho perder cada día 9 millones de dólares a la ciudad de Baltimore. Los cálculos previos estimaban que las pérdidas aseguradas podrían oscilar entre los 2.000 y los 4.000 millones de dólares, según cifras de Morningstar DBRS. Esto podría situar el bloqueo del puerto de Baltimore durante casi dos meses por el colapso del puente Francis Scott Key en el récord absoluto mundial de las compensaciones económicas por percances marítimos.

Este negativo ránking lo encabezaban hasta ahora las indemnizaciones fijadas tras el naufragio del Costa Concordia en 2012 en el que perdieron la vida 32 personas y que generó reclamaciones por alrededor de 2.000 millones de dólares y el bloqueo del Canal de Suez durante seis días por el portacontenedores Ever Given en 2021 por el que se estima que la Autoridad del Canal de Suez aceptó tras un acuerdo confidencial después de múltiples negociaciones con el propietario japonés del buque, Shoei Kisen Kaisha, una compensación de 550 millones de dólares.

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